En esta novela se recrea un periodo relativamente reciente de nuestra historia, la Segunda Guerra Mundial situando la acción en cuatro escenarios diferentes, tan diferentes como lo son los distintos países que jugaron un papel trascendental en esta guerra. Tendremos el punto de vista británico con los Williams y los Fitzherbert, el ruso con los Peshkov, ya sea desde Rusia o desde Estados Unidos tras la emigración, el alemán de los Von Ulrich o el estadounidense de los Dewar.
Empieza la acción en el año 1933 en Berlín, gestándose la subida al poder de Hitler y el estallido de la Segunda Guerra Mundial. Podemos ver en el día a día, como la ascensión de Hitler es imparable, apoyada por la desesperación, la hambruna, el desempleo y la crisis a los que se ve abocada la población alemana tras el fin de la Gran Guerra. Alemania perdió y las condiciones que le impuso el resto del mundo civilizado, como consecuencia de esta pérdida, la tienen ahogada. Un correctivo que, lejos de conseguir el fin que se proponía, consiguió hacer crecer la semilla del descontento y la sensación de injusticia y el deseo de venganza en la mayoría de los alemanes. Este descontento es el que supo manejar Hitler con mano firme y salvaje y, como todos sabemos, resultados catastróficos para ellos y para el resto del mundo.
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